Alfredo Gonzalez frente en el lugar donde nació
El pasado 17 de Junio tuvimos la suerte de conocer y acompañar para avivar los recuerdos de su niñez truncada, al irunés Alfredo González Olascoaga, quien formara parte de los cientos de niños que abandonaron España en las expediciones organizadas por el Gobierno Vasco en 1937 con destino a diferentes países, Inglaterra, Bélgica, Holanda, México, Rusia ...
Su retorno ha sido debido al programa organizado por la Fundación Idi Ezkerra que preside Bernardo Atxaga.
A pesar de que la lluvia nos acompañó al comienzo del día, el hecho fue solventado con la visita realizada a la casa consistorial donde entre otras cosas contamos con una sencilla recepción por parte del señor alcalde, quien en nombre de la ciudad le hizo entrega de unos obsequios.
Después de visitar algunas de las dependencias municipales salimos a recorrer el centro de la ciudad buscando los lugares que el amigo Alfredo recordaba de su niñez y desgraciadamente solo quedaba el “Casino”. En la Plaza del Ensanche le presentamos al insigne Pío Baroja, personaje del que no tenía conocimiento alguno. Buscamos una pequeña pastelería del Paseo de Colón, ya desaparecida. Durantes la comida aprovechamos para entregarle un sencillo obsequio-recuerdo en nombre de nuestra asociación, hecho que el hombre aceptó con sentido agradecimiento, haciéndonos saber que nunca se hubiera podido imaginar recibir atenciones semejantes.
Ya en la tarde marchamos a visitar su calle de Santiago, donde nació, y a pesar de que “su casa” acababa de ser derribada, se emocionó enormemente al llegar al lugar. Nos detuvimos largo tiempo en la “plaza de los plátanos” donde nos contó cómo vivió aquellos años.
A todo esto, hay que decir que nuestro amigo Alfredo, ya antes de iniciar el viaje hacia España, estaba siendo acompañado por un par de documentalistas de televisión que han seguido todo su periplo por Euskal-herria.
Terminamos su periplo irunés visitando la zona de “casas baratas” del barrio de Elizatxo, donde según nos contó su padre había adquirido una que prácticamente no llegaron a habitarla.